Cómo actuar ante una cefalea o dolor de cabeza

La cefalea suele ser de carácter benigno, lo que implica en la mayoría de los casos el no representar un síntoma de enfermedad grave.

La cefalea o dolor de cabeza se trata de uno de los dolores más comunes en el ser humano. Se define como una sensación de dolor que puede afectar a toda la cabeza o a zonas localizadas (p. ej. zona de la frente, nuca, etc.). Representa una de las formas más comunes de dolor en la raza humana. Generalmente el dolor de cabeza se presenta de forma intermitente. Las formas más frecuentes corresponden a la migraña o jaqueca y a la cefalea de tensión.

Tanto las cefaleas crónicas como las recidivantes pueden provocar dolor y angustia, pero es infrecuente que reflejen un problema grave de salud. Sin embargo, cualquier cambio en el patrón o la naturaleza del dolor de cabeza podría ser el síntoma de un problema grave (por ejemplo, un dolor que era esporádico cambie a frecuente, o de leve a agudo), y por este motivo se debería solicitar la asistencia médica lo antes posible.

La cefalea es un problema de interés desde el punto de vista de la salud pública, dado su elevada prevalencia, su carácter crónico en muchas ocasiones, y el deterioro de la calidad de vida que supone para la persona afectada. Suele ser de carácter benigno, lo que implica en la mayoría de los casos el no representar un síntoma de enfermedad grave.

¿Cómo actuar?

  • Un simple dolor de cabeza no debe preocuparnos, pero si esta situación empieza a ser frecuente sería necesario consultar con su médico para que establezca un diagnóstico adecuado.
  • No es conveniente automedicarse (salvo algún analgésico de uso habitual).
  • Procurar controlar aquellos aspectos que estimulan y fomentan la aparición del dolor (p. ej. situaciones estresantes, falta de sueño, comidas copiosas, exceso de alcohol, etc.).
  • Dejar a la persona en un sitio tranquilo y silencioso.
  • Es conveniente relajarse en un ambiente con poca luz.
  • Ayudar a relajarse utilizando respiraciones profundas, en las cuales alargamos la salida de aire (como si sopláramos sobre la llama de una vela).

 

Necesitaremos acudir a un servicio de urgencias:

  • Si el dolor se debe a un traumatismo en la cabeza.
  • Si el dolor es muy fuerte y apareció de forma brusca.
  • Si el dolor se acompaña de vómitos, disminución del nivel de consciencia, visión borrosa o visión doble.