Los primeros auxilios son las medidas urgentes que aplicamos a las víctimas de accidentes y su conocimiento puede salvar vidas.

Fuente: www.lavanguardia.com

Sol, playa, piscina y montaña. Cuatro actividades que solemos asociar con vacaciones, diversión y descanso, pero en las que todos hemos vivido algún momento de peligro. Las temperaturas extremas, las olas de más de un metro, los bordillos de las piscinas o una caída en bicicleta pueden crear situaciones donde el conocimiento de primeros auxilios es crucial para salvar vidas. 

Los primeros auxilios son las medidas urgentes que aplicamos a las víctimas de accidentes o enfermedades repentinas con el propósito de aliviar el dolor y la ansiedad y evitar el agravamiento. Durante estos primeros auxilios, se valora al paciente antes de llevarlo al hospital.

La doctora en enfermería y profesora del área de Ciencias de la Salud de UNIR, Rosa María Piñeiro, cuenta que el primer paso antes de auxiliar a alguien es llamar a urgencias, pero instantes después debemos valorar al paciente para hacerlo reaccionar.

Cómo hacer una evaluación de primeros auxilios

  1. Valoración primaria: en este paso valoraremos la conciencia. Nos acercaremos al paciente y veremos si está consciente y responde verbalmente.
  2. Valoración neurológica mediante la escala de Glasgow: en segundo lugar, haremos una evaluación motora. A mayor puntuación, el paciente estará más libre de tener un traumatismo traumacefálico. Por lo contrario, si puntúa menos de 9 puntos, tendrá un traumatismo grave.
  3. Valoración de la respiración: en primer lugar, nos acercaremos a la boca del paciente e intentaremos escuchar su aliento. En segundo lugar, nos fijaremos en el tórax, ya que nos determinará si la persona está respirando. Y por último, intentaremos sentir el pulso (en la garganta, la femoral o la muñeca).

¿Cómo rescatar a alguien que se está ahogando?

Ante un ahogamiento, el protocolo a seguir es el siguiente. En primer lugar, trataremos de rescatar del agua a la persona que se está ahogando, ya sea en el mar o en una piscina.

En segundo lugar, colocaremos al ahogado de lado para que expulse toda el agua injerida por la boca. Y el último paso será hacer una reanimación cardiopulmonar.

Esta reanimación consiste en realizar 30 compresiones torácicas (apretando el tórax de forma firme y directa con un hundimiento máximo de 5cm) y dos ventilaciones en la boca. Este funcionamiento (30/2) debe repetirse hasta la reanimación del paciente.